Según datos estadísticos de la OMS (Organización Mundial de Salud), cada año un estimado de 1, 35 millones de personas pierden la vida en accidentes de tránsito, mientras que 20 a 50 millones, sufren lesiones no mortales y cada año estas cifran aumentan cada vez más.
Además de las vidas que se pierden, existen pérdidas económicas para los familiares y la sociedad en conjunto. Pero todo tiene una solución y aquí te compartimos algunas acciones para empezar a
reducir estas cifras:
- Respeta las señales de tránsito. El amarillo significa reducir y para posteriormente detenerse en rojo, no para avanzar más de prisa, en lugares donde no se pueda rebasar, no lo hagas. Las señales de tránsito están hechas para proteger tu bienestar y el de los demás.
- Evita a toda costa el consumo de bebidas o sustancias ilícitas. Además de ser un delito, manejar en estado de ebriedad supone un peligro para ti, para las personas que van contigo y para los que te rodean, pues estas sustancias actúan como depresores para el sistema nervioso central, afectando las funciones psicomotoras y la percepción sensorial.
- Aleja los dispositivos electrónicos de ti mientras conduces. Una de las recomendaciones tal vez más obvias, pero más importantes es evitar a toda costa el uso de aparatos electrónicos mientras conduces, pues es uno de los mayores distractores y por el que a diario ocurren miles de accidentes. Si necesitas usarlo, detente en un lugar seguro.
- Mantén tu vehículo en buen estado. Darle mantenimiento periódico a tu carro puede evitarte dolores de cabeza más tarde, revisa los neumáticos, el aceite de motor, los frenos y el sistema de alumbrado.
Una vez pongas en práctica estos y otros hábitos, tu salud y tu vehículo estarán seguros,
además de que proteges a otras personas.